Los primeros ministros de Bulgaria y de Rumanía, Boiko Borisov y Victor Ponta, respectivamente, recorrieron hoy a pie un nuevo puente sobre el Danubio, obra de la constructora española FCC, cuya estructura ya está completada y que se espera sea inaugurado la próxima primavera, informó este jueves Expansión, citando a la agencia EFE.
La visita de los mandatarios, acompañados por el comisario europeo de Política regional, Johannes Hahn, sirvió para celebrar la instalación del último segmento del puente, con lo que las orillas de ambos países ya están conectadas y sólo falta instalar elementos de seguridad y cerrar trámites burocráticos para que sea abierto.
El puente, de 1.971 metros de longitud, une la ciudad búlgara de Vidin con la rumana de Calafat y cuenta con vías férreas, peatonales y de tráfico rodado.
Este puente es el segundo entre los dos países, que ya quedaron conectados sobre el Danubio en 1954 con una pasarela entre Ruse y Giurgiu.
La española FCC ganó en 2007 la licitación para construir el puente, imponiéndose a otros quince consorcios.
El presupuesto inicial del proyecto fue de 116 millones de euros, aunque los problemas técnicos y los retrasos (la fecha original de apertura era 2010), han elevado esa cantidad hasta los 300 millones.
Esta infraestructura forma parte del Corredor Pan-europeo IV que enlaza Dresde, en Alemania, con Estambul. Los primeros ministros de Bulgaria y de Rumanía, Boiko Borisov y Victor Ponta, respectivamente, recorrieron hoy a pie un nuevo puente sobre el Danubio, obra de la constructora española FCC, cuya estructura ya está completada y que se espera sea inaugurado la próxima primavera, informó este jueves Expansión, citando a la agencia EFE.
La visita de los mandatarios, acompañados por el comisario europeo de Política regional, Johannes Hahn, sirvió para celebrar la instalación del último
